¿Cómo influye el insomnio en nuestra salud mental?

¿Cómo influye el insomnio en nuestra salud mental?

Insomnio y salud mental: relación con los problemas laborales.

El sueño es una de las necesidades básicas más elementales del ser humano, ya que a lo largo de la vida podemos dormir alrededor de 20 a 25 años; a nivel cognitivo, el sueño adecuado nos permite procesar aquella información nueva que recibimos a lo largo del día, y a nivel fisiológico el sueño nos brinda esa sensación de descanso y energía, pero aún así es una necesidad que muchas veces se encuentra infravalorada por la mayoría de las personas, ya sea por el ritmo de vida que llevamos o porque mantenemos malos hábitos de sueño sin darle mayor importancia, lo cual puede producir diferentes alteraciones o trastornos del sueño, como puede ser el insomnio. En este artículo te explicaremos lo que es el insomnio y de qué manera puede afectar a nuestra salud mental. 

¿Qué es el insomnio? 

Según el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5), el insomnio se entiende como una alteración del sueño en donde se presenta una ausencia en la cantidad o calidad del sueño, lo cual se evidencia a través de dificultades para iniciar o mantener el sueño, así como también por la dificultad para despertar pronto por la mañana. Para diagnosticar trastorno de insomnio dichas dificultades deben estar presentes al menos por tres meses y con una frecuencia de tres noches por semana.

¿Por qué se produce el insomnio? 

 En la literatura científica se han descrito diferentes elementos que pueden facilitar la aparición del insomnio, entre los más investigados podemos señalar: 

  • Herencia genética. 
  • Dinámica familiar. 
  • Problemas en la higiene del sueño. 
  • Estilos educativos.  
  • Medicamentos. 
  • Sustancias estimulantes. 
  • Alteraciones emocionales. 

 

Insomnio y salud mental 

 Como ya hemos mencionado, el sueño es una necesidad básica que favorece la salud en general. Normalmente las personas que padecen de insomnio pueden presentar quejas constantes sobre las dificultades para poder conciliar el sueño; así, dependiendo de la edad de la persona serán necesarias más o menos horas de sueño, existiendo un promedio de 8 horas al día. Asimismo,  también se pueden presentar dificultades para permanecer dormidos, lo cual genera una sensación de cansancio, falta de energía y motivación.  

De igual manera, las personas que padecen insomnio pueden informar que presentan un patrón de sueño variable, en donde pueden tener varias noches con insomnio seguidas por otras noches en donde logran mejorar la calidad del sueño, estos patrones irregulares de sueño también pueden producir problemas en el comportamiento, como por ejemplo por la presencia de irritabilidad y problemas interpersonales. Los problemas en los vínculos sociales y el distanciamiento se pueden haber intensificado con la Covid-19 y pueden aún perdurar.

Así como también se pueden producir problemas en el estado de ánimo, favoreciendo la aparición de síntomas asociados a la tristeza y la depresión, y la ansiedad. En ocasiones, estos problemas pueden venir cuando sentimos malestar por encontrar la manera en la que podemos afrontar una pérdida.

También es importante señalar que el insomnio puede producir diferentes problemas de salud, ya que se ha descrito en la literatura científica que la privación del sueño puede aumentar el riesgo de presentar alteraciones en la presión arterial, obesidad, problemas con la alimentación, accidentes cardiovasculares, etc.

Cuando el insomnio se debe a problemas laborales y su implicación forense

En ocasiones los problemas del trabajo afectan a nuestra salud psicológica. Pueden producirse por diversos riesgos psicosociales, entre los que destacan:

  • Acoso psicológico laboral. También denominado mobbing, estudiado originariamente por Leymann (1996). El término mobbing proviene de la etología, de un grupo de animales hostigando a otro. Requiere unos criterios de frecuencia y duración, aproximadamente una vez por semana durante seis meses.
  • La violencia en el lugar de trabajo. Es un concepto más amplio que el acoso laboral, ya que incluye los actos violentos perpetrados por personas ajenas al ámbito laboral (p. ej., ser víctima de un robo).
  • El denominado “síndrome del quemado” o síndrome de quemarse en el trabajo. También denominado burnout.
  • Acoso sexual en el trabajo.
  • Un uso arbitrario del poder o maltrato empresarial.
  • Además del el estrés laboral mismo.
  • Tensiones y conflictos interpersonales durante las jornadas laborales.
  • Strain (tensión laboral). Está relacionado con el estrés en el trabajo y las dificultades interpersonales. Se podría decir que la tensión laboral se encuentra a medio camino entre el acoso psicológico laboral (mobbing) y el estrés laboral (Dujo, 2021)*.
  • Tecnoestrés. Se relaciona con los problemas de la persona trabajadora en la adaptación a los requisitos que las nuevas tecnologías conllevan, provocando síntomas de ansiedad o depresión.
  • Cyberbullying o ciberacoso.

En algunas ocasiones, si estos problemas laborales no cesan, una persona puede llegar a experimentar secuelas psicológicas que pueden llegar a derivarse en problemas de salud mental y desempleo e incluso llegar a derivar en una incapacidad laboral permanente. En ocasiones, estas secuelas pueden producir por una situación de mobbing en el trabajo, lo que  puede dar lugar a una incapacidad permanente por acoso laboral.

*Tesis doctoral.

En Psicología Forense Madrid ofrecemos todos los servicios de informe psicológico pericial relacionados con los problemas psicológicos derivados del ámbito laboral.